Lanús tuvo en excelente juego de equipo y se llevó un merecido triunfo. (Foto: Diego Roscop / Ligate una Foto)
Si bien el resultado final no estuvo ni cerca de aquella paliza que sufrió ante La Unión de Formosa hace algunas semanas en “el Poli” Cerutti, el juego de este miércoles dejó algunas sensaciones similares: porque salvo en un primer cuarto muy parejo y en un segundo segmento en el que metió un buen parcial para irse al frente, Atenas sufrió una impotencia notable a lo largo de casi todo el encuentro, careció de ideas ofensivas y fue muy permeable en defensa, y por ello cayó como local ante Lanús por 81-71. Además de inobjetable, la caída fue un golpe desestabilizador para las aspiraciones atenienses de meterse entre los cuatro que irán pasarán directamente a cuartos de final, al revés de lo que sucedió con el Granate, que metió unas fichas interesantes para conseguir ese objetivo.
Los dirigidos por Silvio Santander, que lograron el primer triunfo sobre el verde jugando en Córdoba, mostraron una defensa poderosísima (Atenas traía 84,2 puntos de promedio a favor jugando en casa en la segunda fase y convirtió apenas 71), dominio de los ritmos del juego (la última vez que estuvieron igualados fue 36-36), sangre fría en los momentos decisivos y un goleo bien distribuido, con algunos hombres determinantes: Guaita terminó con 20 unidades (83 por ciento de cancha), Levy sumó 18 (además de 13 rebotes), Byró aportó 16 y Laprovíttola anotó 10.
El primer tiempo fue lo más parejo y entretenido del juego: Atenas arrancó con dos buenos bombazos (8-3, luego de los aciertos de Lábaque y Melvin) y Lanús emparejó pagándole con la misma moneda (11-11, después de los triples de Guaita y Byró). Un par de cortes de energía eléctrica le quitaron ritmo al juego y, al regreso, comenzaron a marcar la superioridad del Granate: la visita metió cinco puntos seguidos, para cerrar el primer cuarto 21-18 y aprovechar los enredos del local en ataque. Con el atrevimiento del juvenil Orresta (ahora segundo base, que aprovecha minutos por la ausencia de Juan Pablo Cantero), los de Santander mostraron las fisuras de la defensa ateniense y se pusieron 29-25. Ahí, con varios aciertos desde la línea de libres (Melvin, Lábaque y Lescano) más un doble de Humphrey, el verde clavó una seguidilla de siete puntos y pasó arriba 32-29. Sin embargo, Lanús lo revirtió y cerró la primera mitad con un robo seguido por una volcada de Laprovíttola, que puso a los bonaerenses 36-34 antes del descanso.
Después del 36-36 (doble de Lloreda en el arranque de la segunda parte) nada volvió a estar equilibrado. Lanús mostró sus mejores cartas, clavó un parcial de 8-0 y se despegó 44-36. Sin perder nunca la paciencia, y haciendo llegar la bola a lo profundo de la pintura (pese a perder en envergadura física con los internos locales), el Grana repitió la brecha poco antes del cierre del tercer cuarto (50-42) y la estiró primero a 10 (triple de Laprovíttola) y luego a 12 (doble de Byró) a poco de comenzados los últimos 10 minutos, mientras Atenas ensayaba mil variantes y ninguna le brindaba lo que “el Che” García esperaba. En el último cuarto se destapó Lloreda y, después de un doble de Humphrey, el Griego pudo acortar a seis, pero el estadounidense falló su libre adicional (59-66) y Guaita, en la siguiente, embocó un triple que tuvo sabor a definición (69-59). Byró, con unos cuantos aciertos sobre el cierre, dibujó la diferencia final, para que el contraste sea aun mayor: la visita festejando un triunfo histórico en el Cerutti (primera alegría en “el Poli”) y Atenas masticando bronca por lo que pudo haber sido y no supo construir.
SÍNTESIS
Atenas (71): Lábaque 9, Lescano 12, García 5, Melvin 8 y Lloreda 19 (FI); Humphrey 10, Sucatzky 2 y Rivero 6. DT: Néstor García.
Lanús (81): Laprovíttola 10, Byró 16, Boccia 5, Guaita 20 y Levy 18 (FI); Wade 4, Orresta 6, Brown 2 y Giorgi 0. DT: Silvio Santander.
Parciales: 1º cuarto, Atenas 18-Lanús 21; 2º, 34-36; 3º, 45-52 y 4º, 71-81.
Árbitros: Daniel Rodrigo y Fabricio Vito.
Cancha: Polideportivo Carlos Cerutti (Córdoba).