Jaz Cowan está en un nivel altísimo. Prolijo y efectivo, ya se ganó el cariño de todo Río Tercero.
Se va pareciendo más y más. En cada partido, recupera aquellos aspectos que lo mantuvieron en el primer nivel en su temporada debut. Esas características innatas que le dan de comer: defensa, presión, garra y el aliento atronador de su público. Las mismas que había perdido en el inicio de esta campaña. Pero, sobre todas las cosas, “recuperó” algo que lo acompañó en sus primeros triunfos en Liga Nacional: el sufrimiento previo a cada celebración. Así, con el corazón en la boca hasta la última pelota, 9 de Julio de Río Tercero completó un fin de semana perfecto y venció a Olímpico de La Banda por 73 a 72.
Precisamente, la defensa con el sello del “Zurdo” Miravet, que hace apenas unos meses le brindaba muchísimas alegrías al público riotercerense, esta vez le provocó jaqueca. Luego de algún sobresalto (parcial 10-3 inicial en contra), los santiagueños se acomodaron y, presionando con intensidad en todo el campo, anularon cada vía de gol del local. Encima, la sequía “patriota” tuvo su contraste en el otro aro: lanzando con mucha efectividad (6/11 en triples hasta el entretiempo), Olímpico se fue escapando hasta sacar la máxima distancia antes de marchar a los vestuarios (29-41).
Al regreso, un doble de John De Groat (goleador con 23 puntos) marcó la diferencia más holgada de la noche, aunque también el punto de inflexión. A partir de ese 29-43 parcial, 9 de Julio se despertó. Desde quién sabe dónde –quizá, del apoyo de su gente- el “patriota” renació cargado de energía. Se convirtió en un aluvión incontenible. Encabezado por Josimar Ayarza (20 puntos y 9 rebotes) y Jaz Cowan (15 y 11), más el aporte defensivo del refuerzo Kenyon Gamble, metió un parcial de ¡19-6! para volver al partido (55-56).
En el tiempo restante, todo fue tensión. Los dos equipos, con estrategias casi calcadas, se dieron “palo y palo” hasta el final (a 2m21s, igualaban en 68). Nada parecía capaz de romper la paridad. Nada, excepto el talento de Diego Gerbaudo y la determinación de Gastón Luchino. El primero, convirtió una “delicia” para sacar un doble de distancia. Y el otro, calibró su cañón y sacudió un bombazo tremendo sobre la chicharra de posesión que rompió la igualdad en mil pedazos (73-69, a 9s7/10). Entonces, tras un triple del incansable De Groat en la última pelota, se desató la fiesta en Río Tercero. Motivos sobraban: pese a jugar con los corazones de sus fanáticos, el “patriota” riotercerense cerró un fin de semana perfecto. Y con una yapa: con el doblete de victorias, salió de los puestos de descenso por primera vez en la temporada.
SÍNTESIS
9 de Julio (73): Gastón Torre 2, Martín Melo 10, Josimar Ayarza 20, Jaz Cowan 15, Pablo Orlietti 2 (FI); Kenyon Gamble 4, Gastón Luchino 8, Emiliano Martina 0, Diego Gerbaudo 12. DT: Daniel Rodríguez.
Ciclista Olímpico (72): Matías Ibarra 3, Denham Brown 12, Fernando Malara 5, John De Groat 23, Jaime Lloreda 3 (FI); Jonatan Machuca 5, Cristian Romero 14, Eduardo Villares 5, Marco Diez, Cristian Amucucci 2. DT: Gustavo Miravet.
Parciales: 20-21; 9-20; 26-15; 18-16.
Árbitros: Juan Fernández y Mario Aluz.
Estadio: José “Gordo” Albert (Río Tercero).
> Foto: Darío Carballo / Ligateunafoto.com